Te convenceré con millones de sonrisas:)

Todo lo que hay escrito en este blog, ha sido escrito por mí -a no ser que se indique lo contrario- producto de mi cabeza y de mis sentimientos NO LOS VUESTROS. Con esto quiero decir que disfrutéis de lo que escribo, pero que no lo copiéis como mérito propio. Gracias a todos simplemente por entrar.
"No me digas que el cielo es el límite si hay pisadas en la Luna"

jueves, 27 de septiembre de 2012

Estoy bien, no importa. #GrandesMentiras

Qué ridículo es callarse cuando quieres decir, incluso gritar, tantas cosas. Tan ridículo como aparentar que no te importa algo que en realidad te está matando por dentro. Tan ridículo como sonreír cuando te cuentan algo que después sólo te hará llorar. Tan ridículo y estúpido como intentar engañarte a ti misma, pensar que no lo sientes, que no te importa, que ha pasado el dolor. Tan jodidamente estúpido como ir diciendo "estoy bien" y convencerte a ti misma, cuando eres la primera que sabes que no es cierto. Quizás sea estúpida por callarme. Pero, ¿para qué decir nada? Tampoco cambiarían mucho las cosas. Tú quieres ser feliz con otra y yo sonrío, te escucho y te vuelvo a sonreír. Para qué decir que me niego a que te haga feliz otra persona que no sea yo, que me niego a creer que haya otra persona en este mundo capaz de quererte más que yo. Quizás es porque quiero creer que no me importa. Que ya ha pasado el tiempo suficiente como para que no me importe, y que ya estoy preparada para verte feliz y que sea otra el motivo. Y probablemente no lo esté. Pero qué hacer, si sólo quiero tenerte cerca. Entonces te escucho, me sonríes, y te devuelvo la sonrisa. Ridículo. Absolutamente, ridículo. (quizás algún día termine por creerme mi propia mentira).




domingo, 23 de septiembre de 2012

En este corazón latiendo te conservo porque eres mi ángel.

Te recuerdo postrada en la cama. Mi mirada infantil desviada. Te veía y no concedía el drama. Cáncer. ¿Cómo entender tu suerte? ¿Cómo entender que otros niños se asustaran al verte? Entre las sábanas blancas, tu piel confundida en ellas. Te giras, y después me miras y  sonríes con bella virtud. Doncella enferma que destella gratitud por cada poro,  mi gran tesoro. Un ángel a quién Dios nombró. Futuro puro que el destino arrebató, no puedo evitar llorar al recordarte a veces, si en mis sueños apareces me proteges del frío. Si me ves entre el gentío sientes mi vacío y hablas, palabras de esperanza que sólo tu danza irradia. No puedo evitar llorar, dejar brotar mi rabia, no puedo perdonar al azar su fragilidad infringida, que un capricho de la vida te dejara herida. El tiempo pasa tan rápido que hasta el dolor se olvida, maldigo a quién te negó el regalo de sentir el sol. Maldigo a esta existencia endeble que nos envuelve en fiebres de un terror que hierve porque pierde a lo que se ama pero tu llama aún derrama cera en mi recuerdo, y en este corazón latiendo te conservo porque eres mi ángel. Somos hijos de un Dios menor, remendamos cada error dibujando en nuestras mentes un mundo mejor, y no es sencillo sacarle brillo a la conciencia cuando la experiencia echa el pestillo al corazón y mata. Si la inocencia escapa por el mal que se desata dentro y los vientos de tormento quitan el aliento. Cuando miro alrededor y no te encuentro, siento que algo de mí también partió en aquel momento. De tu adiós precoz, tu cuerpo frágil se derretía veloz, no te defendía del ataque atroz del tiempo que lo consumía y en mi melancolía le cuento al mundo que exististe un día, que se te quería tanto como el ángel que tu fuiste. Sé que me resguardas del peligro y que estás orgullosa. Quiero contarte tantas cosas, pero me ahogo de tanto pensar como sería la vida sin aquel mazazo, poder charlar, sentir tu abrazo y tu perfume, ver los lazos que nos unen a la eternidad, pero ¿quién es inmune a la inclemencia de esta realidad y asume su tortura sin quejidos? ¿Quién no ha sufrido la falta de un ser querido? Qué se va sin haber vivido, sin haber sentido... tu recuerdo sigue vivo.

Nach - Ángel ¿Quién no ha sentido la ausencia de un ser querido? ¿Quién asume la realidad sin quejidos? Te echo de menos.

Idiota por colgar tus besos con un marco rojo por si ya no vuelvo a verlos más.

Idiota. Por pensar que era especial y sin embargo ser otra más. Idiota por creer cada cosa que decías. Idiota por pensar que quizás algún día algo de esto tendría sentido. Idiota por no ser capaz de ver a nadie más. Idiota por quererte más que a nadie cuando tú... tú jamás llegaste, ni siquiera a la mitad. Idiota por dar todo por algo, que definitivamente no me daba nada (aparte de malos ratos).  Idiota por darme cuenta demasiado tarde. Idiota, idiota y más que idiota. 
Cuántas veces más, mi ingenuidad me hará llorar...

viernes, 14 de septiembre de 2012

Más que ninguna.


Te quiso. Te quiso más que a nada y como a nadie. Te quiso con todo su ser. Te quiso con la piel cada vez que la rozabas. Te quiso con las manos cada vez que anhelaba coger las tuyas. Te quiso con los ojos, cada vez que vuestras miradas se cruzaban. Te quiso con el estómago al sentir mariposas al verte y te quiso al sentir un nudo en la garganta cuando la dejabas sin palabras. Te quiso con la cabeza cada vez que te pensaba. Te quiso con los labios al besarte. Te quiso con la sonrisa que quedaba dibujada al solo oír tu nombre. Te quiso con los oídos al escuchar cada cosa que decías y que guardaba en su memoria, como algo mágico. Te quiso con las piernas, que no podían parar de temblar al verte. Te quiso con los pies al caminar a tu lado.  Te quiso y sintió el amor por todo su cuerpo, desde la cabeza hasta la punta de los pies. Sintió el amor desde que te conoció, y lo ha sentido desde que te marchaste para no volver. Y por irónico que parezca,  es ahora cuando te quiere con el corazón. Ahora que no estás es cuando lo siente, cuando siente un vacío en su lado izquierdo… cuando lo siente hecho trizas.  Es irónico que hablen de corazones partidos cuando un músculo que bombea sangre no se puede partir. Sin embargo lo siente. Siente ahora como duele, como rasga, como aprieta el dolor. Amor suicida, ¿cómo puede doler aquello con lo que no has amado?  Quizás por que te quiso como a nadie. Quizás… porque aún te quiero, como a nadie.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Ahora me toca a mí eso de sentirme bien.

" Una sonrisa. Torcida. Apenas insinuada. Pero sonrisa. Fue sólo una sonrisa, nada más. No lo haría todo mejor. No haría nada mejor. Sólo era una sonrisa. Algo minúsculo. Pero la recibiría. Con los brazos abiertos. Porque cuando la primavera llega, la nieve se derrite copo a copo, y tal vez lo que acababa de presenciar fuera el primer copo de nieve que se derretía"
   
                                                         Cometas por el cielo.



He vuelto a sonreír. A sonreír de verdad, y no por compromiso. Algo minúsculo y a la vez, grande. Pongamos que esa nieve, ese invierno era el cúmulo de tristeza, de lágrimas, de dolor, de noches en vela y de recuerdos... Tanto tiempo ha estado nevando por aquí. Tanto tiempo he estado aguantando con pequeñas dosis de ti y pequeños hilos de esperanza de que volverías.. pero siempre en vano. Tanto tiempo he pensado que jamás pararía. Que este frío y esa sonrisa forzada se quedarían aquí, junto a mi soledad. Sin embargo comienzo a verlo todo más claro. Está pasando. Por fin esto está pasando. Han sido tantas veces las que había pensado que te había olvidado y tantas las veces que me he maldecido por no poder hacerlo, que incluso había perdido la cuenta. Sin embargo estoy segura de que algo ha cambiado. No quiere decir que ya esté del todo curado, pero si que ha cambiado algo. Ya puedo mirar tus fotos sin que se me nuble la vista. Las letras de las canciones, ya no me recuerdan a ti. Ya puedo pensar en aquel verano y sonreír. Ya puedo decir tranquilamente que fuiste uno de mis mejores momentos y ahora uno de mis mejores recuerdos. Estás dejando de dolerme. Por fin luz, por fin algo de calor, lo que necesitaba. La nieve se está derritiendo, el dolor se está marchando... ahora me toca, ser feliz.